La morcilla de cebolla es uno de los embutidos más populares en España. Se suele servir en tapas o como acompañamiento de otros platos, pero también se puede comer sola. Si quieres freírla, sigue estos sencillos pasos y podrás conseguir una morcilla de cebolla perfecta, sin que se rompa.
Cómo hacer para que no se rompa la morcilla
La morcilla es una comida típica de España que se hace a partir de carne de cerdo, sangre de cerdo y arroz. La carne y la sangre se mezclan con el arroz, y luego se envuelven en tripas de cerdo para darle forma.
Aunque la morcilla se puede comprar ya hecha, también es posible hacerla en casa. Si vas a hacerla tú mismo, sigue estos consejos para evitar que se rompa.
Consejos para evitar que se rompa la morcilla
– La carne y la sangre deben estar frescas. Si la carne está demasiado madura o la sangre está oxidada, la morcilla será más difícil de mantener unida.
– La proporción de carne y sangre debe ser de 3 a 1. Si la morcilla tiene demasiada carne, se romperá con facilidad.
– El arroz también debe estar en buen estado. Si está demasiado cocido o está muy pegajoso, la morcilla será difícil de manejar.
– Asegúrate de que las tripas estén limpias y en buen estado. Si están dañadas o sucias, la morcilla será más propensa a romperse.
– Amasa la carne y la sangre con el arroz hasta que estén bien mezclados. Si no lo haces, la morcilla será difícil de manejar y se romperá con facilidad.
– Cuando envuelvas la morcilla en las tripas, asegúrate de que estén bien apretadas. Si las tripas están demasiado sueltas, la morcilla se romperá.
– Cocina la morcilla a fuego lento. Si la cocinas demasiado rápido, la morcilla se romperá.
Cómo se hace la morcilla
La morcilla es un embutido tradicional elaborado con carne de cerdo, sangre de cerdo y arroz. La carne y la sangre se mezclan con el arroz, y luego se envuelven en una tripa de cerdo para darle forma.
Ingredientes
– 500 gramos de carne de cerdo picada
– 500 mililitros de sangre de cerdo
– 250 gramos de arroz
– 1 cebolla
– 1 diente de ajo
– 1 cucharada de pimentón dulce
– 1 cucharada de comino
– 1 cucharadita de sal
– 1/2 cucharadita de pimienta
– 1 tripa de cerdo
Pasos a seguir
1. Pica la cebolla y el ajo y ponlos a sofreír en una cazuela. Cuando estén doraditos, añade la carne de cerdo picada. Rehoga bien la carne hasta que esté hecha.
2. Añade el arroz, la sangre de cerdo, el pimentón, el comino, la sal y la pimienta. Remueve bien todos los ingredientes y deja cocer a fuego lento durante unos 20 minutos.
3. Lava la tripa de cerdo y córtala en trozos de unos 30 centímetros de largo. Rellena cada trozo de tripa con la morcilla cocida, y ciérrala bien para que no se escape el relleno.
4. Pon la morcilla en una cazuela con agua fría y deja cocer durante unas 2 horas. Para comprobar que está cocida, pincha un trozo de morcilla con un cuchillo. Si el cuchillo sale limpio, significa que está cocida.
5. Una vez cocida, puedes servirla caliente o fría. Si la sirves caliente, córtala en rodajas y sírvela con un poco de caldo. Si la sirves fría, córtala en lonchas y acompáñala de una ensalada.
Para concluir, hemos aprendido algunos consejos útiles para freír morcilla de cebolla sin que se rompa. En primer lugar, es importante asegurarse de que la cebolla esté bien cortada en trozos pequeños y uniformes. Luego, hay que asegurarse de que la sartén esté bien caliente antes de agregar la cebolla. También es importante no freír la cebolla por mucho tiempo, ya que se puede quemar fácilmente.